Washington, 5 sep (Prensa Latina) Estados Unidos celebra hoy el Día del Trabajo, como sucede cada año desde 1882, y el presidente Joe Biden buscará votos electorales en sindicatos de Milwaukee (Wisconsin) y Pittsburgh (Pensilvania).
En Milwaukee el mandatario participará en un festival local, que organiza el ayuntamiento de la ciudad junto con los gremios, mientras que en Pittsburgh pronunjciará un discurso en el sindicato de trabajadores del sector del metal.
El lema de las conmemoraciones elegido por Biden es «celebrar el Día del Trabajo y la dignidad de los trabajadores estadounidenses».
A juicio de observadores, la estrategia del presidente es captar votos, por eso no es casual que escogiera como punto de su recorrido a Pensilvania (la tercera vez que lo hace en una semana), teniendo en cuenta la importancia que se le concede a ese estado en etapa electoral.
Nada mejor que el Día del Trabajo para recordar allí que como gobernante del país está interesado en fomentar la sindicalización y la negociación colectiva.
Según Biden, desde el principio dijo que «sería el Presidente más favorable a los trabajadores y a los sindicatos de la historia de Estados Unidos y estoy cumpliendo esa promesa».
El republicano Donald Trump ganó las presidenciales de 2016 gracias a lo que le aportaron los estados históricamente demócratas de Pensilvania, Wisconsin y Michigan, pero el demócrata los recuperó a los tres en 2020.
Bastaría que repitieran los azules esos resultados de hace casi dos años y lograrían un escaño más en el Senado.
En ese sentido, hasta el momento, las cosas van mejor para el demócrata John Fetterman, quien disputará la vacante en la Cámara Alta del republicano retirado Pat Toomey.
Fetterman, vicegobernador de Pensilvania, cobró notoriedad a nivel nacional por ser un fuerte crítico del expresidente Donald Trump (2017-2021) que, por cierto, respalda a su contrincante Mehmet Oz.
Por eso, quizás, Biden decidió poner énfasis en los sindicatos cuando la batalla más cercana en las urnas será en los comicios de mitad de mandato (midterms) del 8 de noviembre que auguran, pese al relativo impulso de los demócratas en las últimas semanas, ganancias para los republicanos.
Dentro de dos meses se renovarán los 435 escaños de la Cámara de Representantes y 35 de los 100 asientos del Senado; además, los estadounidenses definirán otros cargos a escala local y estadual.